Con cuatro años marchó a Basilea, donde había sido destinado su padre. Más tarde, estudiaría Derecho en la Universidad de Zurích, en la que también estudió Teología Protestante (aunque era ateo), continuando sus estudios en la Universidad de Heidelberg y licenciándose en la de Basilea. Trabajó en San Petersburgo como tutor de los hijos de un general finlandés durante ocho años, y publicó por primera vez en 1881 tras su regreso a Suiza, con el seudónimo de Carl Felix Tandem. Fue profesor en la escuela de Nauveville y editor del periódico Neue Zürcher Zeitung. En 1892, marchó a Lucerna, en donde fijó residencia y comenzó a gozar del éxito de sus publicaciones. En 1919, le fue concedido el Premio Nobel de Literatura.